El reconocimiento fue otorgado a productores de 15 chacras certificadas completamente, con el sello de producción agroecológica.

La directora general de Certificación Participativa del Ministerio de Agriculura Familiar, Juliana Rajido, explicó que los beneficiarios se dedican a la producción frutihotícola, de envasados y mermeladas, yerba mate y el turismo rural.

Se trata de pequeños y medianos productores que llevan adelante prácticas alternativas como pastoreos rotativos, aplicación de biofertilizantes, autoproducción de semillas, y lucha biológica (atracción de insectos beneficiosos gracias a bandas florales y aromáticas).

Estas familias trabajan con un sistema sostenible que promueve el cuidado ambiental, mediante el fortalecimiento de la biodiversidad y la actividad biótica del suelo. Basándose en el uso mínimo de insumos externos, sin uso de fertilizantes y plaguicidas sintéticos, ni manipulación genética, utilizando métodos que minimizan la contaminación del aire, suelo y agua.

Los productores trabajan en grupo en el proceso de transición de entre dos a cuatro años en los cuales periódicamente son visitados por certificadores que avalarán los trabajos para otorgar el sello válido por un año, para vender sus productos agroecológicos.