En la superficie donde confluyen yerba mate y otros árboles nativos se mantuvo la productividad, se observa una mejor calidad y sanidad de la hoja, se promueve mayor fertilidad e infiltración de agua de lluvia en el suelo, un mejor aprovechamiento de la radiación solar disponible y se generan recursos alimenticios y maderables, aseguró el ingeniero del Servicio de Extensión Yerbatero del INYM, Sergio Rigueresman en el programa Buen Día Provincia de Radio LT 17.

La arborización facilita la infiltración de agua, protege el suelo contra la erosión y permite conservar la biodiversidad. Las conclusiones de los estudios y los resultados en las chacras son alentadoras, explicó.

 

Sistemas agroforestales con yerba mate es uno de los ejes que impulsa el INYM, el INTA, la UNAM y el Ministerio del Agro y la Producción.