En la lucha permanente con la competencia, la alternativa estratégica es la diversificación inteligente, que promueve nuevos mercados con nuevos productos. Y eso es cosa para emprendedores diferentes, como Nicolás Olivera que cultiva dos hectáreas de paltas y una de mango desde hace diez años en San Javier, Misiones.

En la actualidad están abocados a producir paltas por la alta demanda en el mercado. Comercializan a las provincias de Río Negro, Buenos Aires, Tucumán y Corrientes. Como si fuera poco, las paltas de desechos comercializan a una industria de pulpas de frutas en la misma localidad de San Javier, sostuvo Olivera en el programa La Tarde de Provincia de Radio LT 17.

 

“Hay un boom mundial de consumo, y acá en Misiones el cultivo se está expandiendo. Es la fruta a la que mejores perspectivas le veo”, dice el productor, desde su chacra que está atrás del Cerro Monje en San Javier.

En cuanto a las variedades, Olivera explicó que producen la palta hass porque a diferencia de la mayoría de otras frutas, compuestas por carbohidratos, la palta Jass está conformada principalmente por grasas buenas, resultando increíblemente nutritiva y saludable.

Palta Hass

Es rica en vitaminas (A, B, E y K) y minerales, contiene fibras pero no sodio ni grasas saturadas. Tiene una acción beneficiosa para el mejoramiento del metabolismo y para controlar o reducir el apetito, por lo que, aunque no lo creas, la palta es recomendada en dietas de adelgazamiento.

Por su alto contenido de antioxidantes es una saludable alternativa para prevenir los efectos de los radicales libres, causantes del envejecimiento.

Su consumo también es aconsejado en mujeres embarazadas y en personas con anemia, debido a que contiene ácido fólico (del grupo de vitaminas B).

Y desde un punto de vista de la belleza más natural, la palta es ideal para hidratar la piel.